INJERTOS
FRUTALES
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El
árbol frutal, generalmente, consta de dos partes diferenciadas: una,
la raíz, a la que se denomina PATRÓN o PORTAINJERTO y, otra,
la VARIEDAD, que es la que pro- porciona la fruta. Ambas partes están
unidas por el INJERTO.
INJERTAR
consiste, por tanto, en unir o insertar una parte de una planta en
otra, de manera que queden soldadas y se desarrollen juntas formando
una planta única.
Para
qué sirve el injerto
La
práctica del injerto se realiza desde la más remota antigüedad. De
este modo se han podido transmitir, de generación en generación,
las variedades frutales de mayor interés. La pro- pagación por
semilla no da lugar a la variedad deseada, al no producir fielmente
sus caracte- rísticas debido a la disgregación de sus carac-teres
genéticos
El
injerto permite aprovechar las siguientes ventajas:
a)
Propagar una variedad o una especie que por otro método (estaquilla,
acodo, etc.) re- sultaría bastante difícil.
b)
Beneficiarse de las características de ciertos patrones capaces de
vegetar en determina- dos terrenos donde la variedad cultivada no
podría subsistir con raíces propias.
c)
Cambiar una variedad por otra más comer- cial (reinjertación).
d)
Beneficiarse de la influencia enanizante o vigorizante de ciertos
patrones.
e)
Cultivar variedades sensibles a enfermeda- des de raíz o de cuello,
empleando patrones resistentes
Condiciones para el injertado:
1.ª
La variedad y el patrón deben ser compati-bles, es
decir, han de poderse unir y formar una
sola planta.
2.ª
La variedad y el patrón deben proceder de material
vegetal sano, es
decir, no han de presentar
enfermedades y deben estar libres de
virus.
3.ª
El cambium, o zona generatriz (parte situada debajo
de la corteza) del patrón y de la variedad
deben quedar en íntimo
contacto.
4.ª
El injertado debe hacerse en época
opor- tuna, en
que patrón y variedad se encuen-tran
en estado fisiológic adecuado de ac- tividad
vegetativa. Cuando la corteza se separa
con dificultad (está muy pegada) la época,
por lo general, no es oportuna.
5.ª
Inmediatamente después del injertado todas las
superficies cortadas deben protegerse cuidadosamente,
con cinta plástica, mastico
pasta protectora, para evitar la desecación e
infección de los tejidos.
Clasificacionde los injertos
Existen
muchos tipos de injertos, aunque en la práctica algunos no
tienen interés y otros simplemente muestran pequeñas diferencias
entre sí.
básicamente
se emplean dos tipos de mate- rial vegetativo:
a)La PÚA, o trozo de rama de un año (con dos o tres yemas).
b)
La YEMA, con o sin madera adherida, dependiendo del tipo de injerto.
Los injertos más prácticos y que se conside- ran más interesantes,
por ofrecer buenos resul- tados para nuestra práctica frutícola,
son los que a continuación se describen
a)Injertos de PÚA
– HENDIDURA O PÚA
– CORONA O CORTEZA
– COSTADO O LATERAL
– INGLÉS
b) Injertos de YEMA
– ESCUDETE O YEMA
– CHAPA O PLACA
– CHIP O ASTILLA
Teniendo
en cuenta la época de ejecución, podrían clasificarse en:
a)Primavera:
Generalmente todos los injertos de púa, así como el de placa y el
chip.
b)
Finales de verano: Principalmente el de escudete y el chip.
Injerto de hendidura
En
frutales de hueso no es recomendable este tipo de injerto ya que son
propensos a segregar “goma” por las heridas, impidiendo una buena
cicatrización. REALIZACIÓN. Sobre el tronco, previamente
descabezado en invierno, se refresca la superfi- cie cortada en el
momento de hacer el injerto.
La hendidura, diametral al tronco, se
realiza con una navaja a la que se golpea con una pequeña maza de
madera. Practicada la hendidura se introduce en su centro una cuña,
con el fin de que la hendidura quede abierta y resulte más fácil
introducir las púas. Cada púa, de dos o tres yemas, se corta
enbisel en dos caras opuestas. Normalmente se introducen dos púas en
la hendidura, una en cada extremo de la misma.
Esta operación exige
que las púas estén ligeramente desplazadas hacia el interior de la
hendidura, pues de estar alineadas exteriormente púa y patrón la
zona de cambium de ambas no coincidirían, al ser la cor-teza del
patrón más ancha que la de la púa.
Posteriormente
se efectúa el atado y se cubren con mastic todas las heridas, tanto
en la hendidura como la parte superior de las púas. ÉPOCA. La más
adecuada es cuando el patrón o portainjertos tenga las yemas
hincha-das, pero antes de que inicie el crecimiento activo, pues en
este caso, al rajar el patrón, puede despegarse la corteza con el
consi- guiente peligro de no prender bien la púa. En manzano y peral
se efectúa en Marzo- Abril. En cerezo y ciruelo, que brotan precoz-
mente, antes de cicatrizar, pudiendo llegar a desecarse, es
preferible efectuar la hendidura en verano (Septiembre), con los
ramos a rajar bien agostados; en las púas a injertar se les recortan
las hojas dejando únicamente los peciolos (rabillos de las hojas)
para proteger a las yemas.
Como
en el injerto de hendidura, en este caso también se descabeza
el tronco o las ramas. Generalmente se utiliza para sustituir, en
árboles adultos, la variedad cultivada por una nueva. De fácil
ejecución, este injerto reemplaza al de hendidura en cualquier cir-
cunstancia.
REALIZACIÓN.
El tipo de injerto que se va a considerar es el denominado “Sistema
corona perfeccionado”, el cual introduce un pequeño detalle que lo
hace más eficaz. A la púa, al introducir en la corteza del árbol,
se le da un corte longitudinal hasta dejarla en la mitad de su
grosor, para facilitar un apoyo de asiento en el tronco del árbol.
El
extremo inferior de la púa se corta en bisel. En uno de los lados de
la púa se corta un poco de
corteza
en toda su longitud (detalle del “per- feccionado”). En el tronco
o rama se practica una incisión vertical que afecta solamente a la
corteza. Con la espátula de la navaja de injertar se levanta la
corteza, por un solo lado, quedando el otro sin despegar.
Para
el injertado se hace coincidir el lado de la púa que se descortezó
ligeramente en toda su longitud con la línea de corte vertical
efectuada en el tronco o rama y que no se des- pegó. El otro lado de
la púa quedará solapado con la corteza del tronco. A continuación
se procede al atado y a la protección con masticde las heridas. Otra
modalidad consiste en cortar la púa en bisel, sin ofrecer un apoyo
de asiento sobre el tronco. ÉPOCA. Se efectúa al comenzar el movi-
miento de savia, en Abril para manzano y peral, y a finales de
Febrero para cerezo y ciruelo.
Injerto
de costado o lateral
Es
un tipo de injerto habitualmente utilizado en la sustitución de
variedades. Así mismo es empleado para crear nuevas ramas en zonas
desnudas del árbol. Se le denomina también MULTIPÚAS por la
utilización de numerosas púas injertadas a lo largo de una misma
rama o tronco del árbol.
Hay
varios métodos de insertar o introducir material vegetal, tanto bajo
la corteza del tronco como en las ramas del árbol, cuando sus diá-
metros son comparativamente grandes con res- pecto al de la púa a
injertar.
REALIZACIÓN.
En este sistema se conserva la mayor parte del ramaje, aunque se
somete a un pequeño rebaje y poda de las ramas que pudie- ran
desequilibrar al árbol. Este injerto es distinto al del
procedimiento clásico de cambio de va- riedad por descabezado del
árbol o de las ra- mas (como en los casos de corona y hendidura).
Sobre el portainjerto, en su corteza, se efec- túa una incisión en
forma de T en la cual se introduce una púa, con dos o tres yemas,
cor- tada en bisel.
Para la sujeción de la púa puede utilizarse una
tachuela o clavo. La zona de injerto y el extremo superior de la púa
se cubren con mastic. ÉPOCA. La más apropiada es cuando el árbol
está movido, al comienzo de la brotación (Marzo-Abril)
Injerto de yema o escudete
la
yema de la variedad, debiendo evitar que su extremo superior quede
por encima de la T (si todos los
sobrepasa
se corta el trozo sobrante). A conti- nuación se procede al atado,
comenzándolo por la parte inferior y procurando que no queden huecos
por donde pudiera entrar aire, pero dejando al descubierto la yema.
Este
injerto no requiere el empleo de mastic. El injerto se considera que
ha prendido cuando la yema se hincha y el trozo de peciolo amarillea
y cae de forma natural. Si el peciolo se deseca, volviéndose oscuro,
y no se desprende, el injerto no ha prendido. Cuando la yema
injertada brota en prima-vera, el patrón se descabeza por encima del
punto de injerto.
ÉPOCA.
Este injerto se efectúa cuando el patrón está en actividad
moderada, es decir, en savia, con una buena separación de la corteza
del leño. El injerto puede realizarse en primavera, al inicio de la
vegetación (injerto a ojo velante) o a comienzos de otoño,
Agosto-Septiembre (injerto
a
ojo dormido). Esta última época es la más habitual.
Cuando
se efectúa en primavera, las varetas de la variedad a injertar se
toman en invierno, almacenándolas a unos 4 ºC introducidas en
bolsas de plástico, evitando que se desequen. En el injerto de
otoño, la vareta se toma en el momento de su realización o unos
días antes, defoliándola como se ha explicado
VÍDEO:
http://www.youtube.com/watch?v=k1WMgrQLnJc&noredirect=1
BIBLIOGRAFÍA:
Nekazaritza Saila; (2007). Injertos en frutas. Disponible en: http://web.bizkaia.net/nekazaritza/agricultura/boletines/ca_injertos.pdf. (18/09/2013).
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